Podando plantas de cannabis

La poda es algo habitual en nuestro día a día. Hay que tener cuidado en cuanto a lo que entendemos por poda. PODAR NO ES QUITAR LAS HOJAS QUE ESTÁN AMARRILLEANDO. Lo digo porque estas hojas son buenas aunque las veamos débiles, ya que la planta va a realizar la fotosíntesis con ellas y cuanto más le quitemos va a hacerla peor.

Una poda bien realizada va a mejorar el crecimiento y la producción de nuestra cosecha. Cuando vuestras plantas nazcan en el semillero y broten sobre la tierra, ignorar el primer par de hojas (cotiledones). Cuando crezcan un mínimo de 2.5 cm y el segundo par de hojas despunte sobre el tallo hay que cortar la hoja izquierda del primer par real.

Cuando nazca el tercer par de hojas hay que repetir la misma operaciión pero con la hoja opuesta a la cortada anteriormente. Así vamos a equilibrar la planta. Este proceso hay que seguir haciéndolo durante 6 podas más.











Para obtener un tallo doble hay que seguir el mismo proceso hasta el 4º corte y esperar hasta el 6º par de hojas y cuando salga el par 7º se le quitan ambas hojas. La planta va a doblar su tallo y producir el doble.





















Recomendación: Practicar primero esta técnica en 1 o 2 plantas y cuando lo dominemos podemos pasar al resto de la plantación.